El filme de Perezcano cierra con broche de oro al ser galardonada con el Premio Ariel 2015 a mejor guión original
La ganadora como mejor largometraje en el Festival Internacional de Cine en Morelia cierra con broche de oro al ser galardonada con el Premio Ariel 2015 a Mejor Guión Original.
La idea de una historia contada de distinta manera, era lo que movía a Rigoberto Perezcano, para escribir sobre Mabel, en Carmín Tropical. La película habla de un regreso, una muerte, amistad y, por supuesto, de la diversidad sexual aceptada en la comunidad muxe del Istmo de Tehuantepec.
El muxe es la figura del homosexual masculino, la aceptación institucionalizada del tercer género en la región del Istmo de Tehuantepec, pero con mayor presencia en Juchitán de Zaragoza; en otras palabras un muxe es "una mujer en el cuerpo de un hombre" es una figura normal, natural, con un papel socialmente importante.
El camino de la cinta comenzó con la peculiar forma de vida de los muxes de Juchitán, la cual llamó la atención del cineasta, para plasmar una historia universal, pero con la figura central del gay istmeño.
Rigoberto Perezcano comentó, "Carmín Tropical" nació a partir de las repetidas visitas que tuve al Istmo de Tehuantepec, particularmente es una zona que me gusta muchísimo; sin embargo, me interesó mucho la tolerancia y la apertura que tienen hacia el travestismo".
La cinta fue ganadora como mejor largometraje de ficción por el Festival Internacional de Cine en Morelia y su más reciente triunfo lo obtuvo en la 57 entrega de los Premios Ariel, como Mejor Guión Original.
El proceso de realización fue largo y de ardua preparación, "Siempre lo digo sin temor a equivocarme, es una historia que no se parece a otras, no hay una referencia de una película, en México y del extranjero, que hable sobre un muxe que regresa a su pueblo donde lo toleran, para investigar un crimen; bajar esto al papel me costó mucho trabajo".
Perezcano aclaró que la cinta busca transmitir la tolerancia, la apertura que hay en Juchitán hacia los muxes, y mostrar la aceptación que hay en una comunidad tan pequeña del estado de Oaxaca. "Me parece que esto es muy importante, creo que lo que está pasando en Juchitán es ejemplar en muchos sentidos".
Después de Carmín Tropical, el director oaxaqueño prepara su siguiente material; además, que ya cuenta con el apoyo para poder realizarlo. Para sus futuros planes tiene la visión de filmar fuera de México. "Para mí, los verdaderos premios son tener la energía y fuerza para levantarse y decir, voy a hacer una película más".
Considera que las nominaciones y los galardones son un reconocimiento importante para su trabajo, pero busca esencialmente percatarse de que su labor en el cine ha rendido frutos, sobre todo en su crecimiento como cineasta.
El cineasta externó que uno de sus principales intereses es que su trabajo se proyecte en festivales; sin embargo, sostiene que lo verdaderamente importante es transmitir sensaciones y emociones al espectador, "Mi deseo primordial es que la película comunique, sientas y te transmita, te haga reír, te haga llorar, que te haga sentir que estás viendo a un personaje, que eres casi un intruso que está viendo su vida".
"El cine en Oaxaca es tan complicado como hace 50 años, creo que lo más difícil es hacer una historia y que transmita, que te conmueva", expresó el director; además de que se mostró entusiasta ante los nuevos talentos, a los cuales impulsa y aporta conocimientos.
"El cine es parte de mi vida, es parte de mi entrega profesional, me da de comer, me permite seguir creyendo que voy por el camino correcto, me siento muy afortunado de seguir desarrollando mi trabajo como cineasta, eso me da mucha felicidad" finalizó.
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